PROSA

Tu mirada es poesía, tus besos son prosa

entre recuerdos furtivos tu imagen brota

Como un latido que hiere entre cada silencio
como un silencio en donde cada herida late
...................(hasta morir)
después de cimbrar la vida en un trapecio
hasta irse recio dejando la vida cimbrada
...................(hasta morir)

Como un suspiro que se evapora en nubarrón
como nubarrón que evaporado se siente suspiro
...................(hasta en las arterias)
después de mirar la memoria ahora color marrón
hasta decolorar las memorias cuando no te miro
....................(hasta besar arterias)

Tu mirada es poesía, tus besos son prosa
entre momentos, instintos, tu imagen me alborota

Como un vampiro mordiendo tu exangüe garganta
como de garganta exangüe muriendo un vampiro
...................(soy un desagüe en mis venas)
después arrancar mi reflejo por ella, locura tanta
hasta ir cayendo en la garganta de una botella, deliro
...................(como un desagüe de penas)

Como de la nada empieza a vibrar el cuerpo
como incorpóreo vibrando en piezas nadar
.....................(en recuerdos)
después llega el silencio arrancándome el tiempo
hasta temporizar arrancados silencios y llegar
a no distinguir ya la realidad...

Mientras eres poesía y prosa
entre palabras que se hacen letras que transpiran.
Y mientras eres poesía y prosa
hasta para leer frente al espejo mientras mis manos te riman.

 Me evaporo en suspiros antes de llegar a ti

como alcohol que lame la tersa piel

que te recorre hasta el anochecer

Me disperso en latidos antes de llegar a ti

como un reloj con su último tic tac

que se detiene a esperarte en un diván

sin que el tiempo nos empate...

Me dilato en el espacio antes de llegar a ti

como el termómetro que acaricia tu piel

que te recorre sin apenas calentarte

Me descarno en latidos antes de llegar a ti

como el sueño que sigue compungido

sin poder sobrevivir, muriendo por ti

sin que el viento nos haga flotar al recordar

Me evaporo en susurros que no llegan a ti

¿Qué más me queda por expresar, decir?

¿Y cómo me despojo si en eso mismo me arrojo?

Y todo mientras el día oscurece.

Y todo mientras te veo hacerte éter

entre mis brazos sin poder tocarte

entre mis brazos sin alcanzar a rodearte

entre silencios que nuestros labios ya no comparten... 

Quizás no sea perfecto para ti

pero aquí tienes un músculo que no ha dejado de latir

¿cuánto vale llorar? Si no te puedo sentir cerca de mí

No sé si los recuerdos van o vienen entre los ríos

ni entre mis cuervos creí que tanto podría sentir, mis críos

En un año verte tres veces no se compara con los mil latidos por minuto por ti

 Y por eso te dejé volar...

y si caes, curaré tus alas...

 A veces el tiempos e hace inmenso

cuando me pierdo contigo en lo intenso...

 de los recuerdos.

 ¿De qué me sirven los latidos si no los escucha tu estetoscopio?

Tu ausencia me hace arder

y tu presencia pues también

mi memoria repasa el ayer

como una bala en mi sien

Aún no se seca mi aliento

Sueño, esfúmate despacio

ya que contigo mi aliento

lentamente en un momento

cae a un barranco, muy lento

Y aún no se seca mi aliento

aún no se secan mis suspiros.

Y aún tu ausencia me entume

esperando el recuerdo se esfume.

 Toma lo que queda de mí

no son más que sangre, huesos rotos

y sueños resquebrajados

pero eso sí, hasta el último latido serán tuyos.

Abriré mis venas para que no mueras de sed

después de todo, ¿qué más puedo ya perder?

Si tu aliento se disipa en susurros ajenos

La peor cruda de mi vida fue después de haberme

embriagado de tus labios.

Cuando tus latidos y los míos se sincronizaban, ambos podíamos escuchar los silencios y sentir cómo los sonidos electrificaban la pasión.

Si no sientes que haya latidos, acurrúcate en mi pecho, en ese recinto escucharás tu nombre..

 Un corazón es como una antorcha, están hechos para arder...

y en algún momento, consumirse.

En la noche obscura
se abriga de locura
la ausencia de tus labios

Algunas palabras quedaron en pretérito

en la nota que todavía no te he escrito

entre letras y álgidos silencios me repito

¿cómo de tus labios quedé proscrito?

En el caos del merodeador silencio

cuando miles de voces hacen eco

no me hacen caso ni los latidos

les digo que callen pues ya te has ido

Es cuestión de tiempo para que el tiempo avance

en su enredado tramado dejando un percance

y es cuestión de tiempo para que algunas cambien

y otras se olviden en las lagunas de la memoria

pero la marea de recuerdos tarde o temprano vuelve.

Algunas palabras quedaron en pretérito

dejando en silencio tu nombre cuando grito

entre letras y suspiros aún me repito

¿cómo de tus labios me hice adicto?

En ese otoño antes que las hojas

cayeron los pliegues de mi corazón

se eclipsó diciembre y mis ojos sin verte

deambularon buscando la efímera razón

Aunque sea solo por hoy quédate en mis sueños

así podré morir en suspiros al despertar.

la humedad en mis mejillas se hace presente

entre ruidos, silencios y esquirlas,  sigues ausente...

entre cardos, brisas y espinas, calas en la mente...

Eres el marcapasos que hace funcionar mi corazón
para afinar mis latidos te tengo de diapasón
el ritmo de mis suspiros se acelera con ilusión
al encontrarte en la memoria esperando se repita hoy
el ayer que en mis sueños prófugos se posó
dejando fluir en mi sangre tu nombre en forma de pasión
cuyas letras son sinónimos que me arrancan la razón.

El problema con mis suspiros es que al darlos además de  no dejar respirar, no llegan hasta ti.

 Ah, ¡qué manera de respirar!

Los pulmones destilaban la pasión

en pequeños susurros que parecían no acabar.

Uf, ¡qué manera de recordar!

como si los instantes sin dilación

fueran eternos hasta ya no tener a donde ir.

Mmmm, ¡qué manera de soñarte!

Como si el mundo se redujera

al roce en las noches con tu piel

Ssss, ¡qué manera de despertar!

Recostado junto a tu ausencia

con el tiempo alejándote sin clemencia

 ¿Me dejas escribirte un último poema?

No importa que sea mi eterna condena

Qué le hace que mis venas antes llenas, hoy ateridas

se vuelvan secas de tanto esperar hasta hoy...

¿Acaso no me recuerdas con la luna llena?

¿Ni siquiera un beso en tu memoria se acurrucó?

Dicen que el tiempo entierra con nuevas penas

lo que antes fue, lo que una vez adentro latió

(dejando mi voz muda en tu memoria)

¿En cuánto tiempo se desangran las letras?

Porque lo demacrado por ti ya mucho duró

entre incógnitas el tiempo no siempre da respuestas

y solo queda en la memoria lo que en ti latió

¿Me dejas escribirte un millón de poemas?

Para que veas que aún sigues en mis venas

No importa que tus ojos no recorran mis letras

que en el tiempo se pierdan aciagas, dispersas

(dejándome en un último adiós...)

Pues ya solo soy un montón de ateridas palabras

que en el tiempo caen rotas, se descalabran

es lo que mis brazos al extenderse para ti dan

 y es que entre lágrimas te perdí por soñarte con afán.

¿Me dejas escribirte un último poema?

antes que la amorfa elocuencia pierda

ya el tiempo dirá cómo me hice olvido

cómo quedé guardado en un rincón...

(en un recoveco de tu corazón...)

¿Cada uno de mis abrazos de tu memoria se esfumó?

¿Acaso solo el viento en susurros se fugó?

Pues entre silencios dejas un exangüe corazón

mira ahora como el tiempo el olvido fraguó

¿Me dejas escribirte un último renglón?

Qué le hace que cada silaba quede sin rima

así entre letras y silencios por ti mi pasión

quedará escrita mientras te alejas como una espina

(quedando aquí para quizás otra ocasión)

(dejando al fin un desagüe en el corazón...)

Por horas perdernos sin el tiempo
dejar a la pasión profundo desbocarse
en esas fantasias sumergirnos lento
dejar en la piel huellas para recordarte.

Por horas hundirnos en la piel
en las sales del cuerpo naufragar
como extraños jugar un papel
como en un sueño fugaz temblar. 

Mientras la sangre hierve
Mientras minutos pasan
Mientras la piel se derrite en cada latido. 

Por horas nadar entre sábanas
que se marcan de ardiente calor
entre labios que buscan con ganas
Ser uno, simplemente aquí, tú y yo. 

Por horas ser como sutil tacto
que estremece ocultos deseos
perdernos en nuestro febril acto
fugarnos como ávidos reos.

Mientras la pasión escurre en espasmos
Mientras por un instante nos vamos
Mientras me regreso cuando te miro.

Por horas dejar a la razón despojarse
como conteniéndose hasta estallar
dejando a los pulsos encontrarse
hasta ya no poder más ni hablar.

Por horas perdernos en el tiempo
como animales lo etéreo buscando
en sublimes contorsiones, momentos
hasta en dopamina estarnos ahogando.

Mientras se encuentran los instintos
mientras hacemos eterno lo fugaz
hasta correr las horas en minutos
mientras todos los mientras los encuentro en tu mirada.